“En respuesta a por qué escogimos la canción de “La Rata Antonieta” –explica Rebeca Domínguez- fue por varias razones: Supimos que el confinamiento en las casas estaba produciendo muchos problemas entre padres y niños que estaban aburridos y esta canción reúne ciertos atributos que cumplen ciertos objetivos: Es una canción alegre que sube el ánimo… propone bailar lo que saca a los niños de la inmovilidad.”

“El baile es entretenido y fácil de aprender. Por eso seleccionamos esta canción”, añade Domínguez.

 

 

Agualuna para rato

El grupo de música infantil “Agualuna” es un grupo de larga trayectoria que se formó en 1998 integrado por cinco mujeres dedicadas a la educación y a la música. El grupo ha orientado su hacer desde sus inicios a difundir, educar y entretener a través de la música al mundo infantil, promoviendo valores significativos para el desarrollo integral de la formación de los niños, realizando recitales en colegios y eventos.

Entre los logros interesantes se destaca una gira a Europa (Suecia, Alemania); festival de música infantil (Argentina) y el trabajo conjunto con otros grupos del género como Mazapán, Pin-Pon y Zapallo, entre los cuales se cuenta la producción de un CD para las Aldeas SOS.

El contenido de su trabajo va dirigido a etapa de pre escolar, primer ciclo básico y familias. La puesta en escena de su presentación integra elementos corporales, auditivos, visuales y literarios.

Educación y Música

“Es un desafío- señalan sus integrantes de constante búsqueda e investigación tanto en el aspecto artístico musical como en el área de la educación, contribuyendo y apoyando sus objetivos basados principalmente en el respeto y en el amor a los niños”.

En el marco de esta iniciativa se destacan dos grandes producciones discográficas “Agualuna a la una” canciones para bailar, cantar y escuchar y “Había una vez el agua”, apoyado por el Fondo de la Música, cuento musicalizado que fortalece y sensibiliza en los niños la conciencia de la importancia del cuidado del agua.

Nuevos integrantes

Durante el año 2018 se renueva el grupo incorporándose a este tres hijos de Agualunas. Los hermanos Vinot, hijos de Soledad Opazo; José y  su hermana Milén, y se suma Luz María Pérez hija de María Elena Domínguez. Se integra también Ignacia Carrillo, violinista. Esta generación joven le da un nuevo impulso al grupo de carácter ahora más “familiar” y  se embarcan en recrear el cuento “Había una vez el agua” compuesto por Cecilia de la Fuente, transformándolo en un espectáculo que integra música, juegos, bailes y actuación. Para el teatro se invita a participar en este proyecto a dos actrices;  Valeria Nuñez y Rocío Linsambarth.

2019 es el año en que terminan de prepararse para sus primeras presentaciones en vivo las que se realizan durante el mes de diciembre en 3 colegios de la Región Metropolitana. Estas presentaciones son parte de una serie para 2020 y 2021, que se ven frustradas por la pandemia.

Instrumentos:

Guitarras, charango, bajo eléctrico, flauta dulce, flauta traversa, bongos, caja y platillo, djembe, bombo, accesorios de percusión.

Integrantes del grupo:

  • Soledad Opazo: profesora de Música de la Universidad Católica de Valparaíso
  • María Elena Domínguez: Profesora de Música, Universidad Metropolitana (UMCE).
  • Milen Vinot: Interprete superior en clarinete Universidad de Chile, Profesora de música. Universidad Andrés Bello.
  • Luz María Pérez: Profesora de Educación musical para pre escolar y básico, Universidad Andrés Bello.
  • María Ignacia Carrillo: profesora de música mención dirección de orquestas infantiles y juveniles.

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