Por segunda vez en Valparaíso, los charangos llegan para llenar de mágicos sonidos  la bohemia del Puerto Principal, del 21 al 23 de septiembre, se presenta la XV versión del Festival Internacional Charangos del Mundo.

Pero …  ¿Qué es el Festival “Charangos del Mundo?  No solo se trata de un ciclo de conciertos y una propuesta de actividades académicas o pedagógicas…Explica Ana Saladino, productora de estos eventos «se trata de un encuentro intercultural que tiene por objetivo, instaurar en el mundo de la música popular, un original patrón en el imaginario colectivo: un nuevo corredor cultural abierto e inclusivo, integrado por múltiples y variadas expresiones donde convergen «los ecos de un pasado común» provenientes de diferentes regiones del país, como de otros países.

El Festival Charangos del Mundo, es -en sí mismo- un encuentro de culturas, un espacio creado para compartir y permitir generar confraternidad e identidad latinoamericana.

Este proyecto lleva ya 15 versiones y las mismas se han llevado a cabo en diferentes paises. Pero la singularidad del mismo es la presencia ininterrumpida en Latinoamérica. La permanencia y continuidad del Festival han colaborado definitivamente en abrir nuevos escenarios para el charango. Al respecto, aclara Ana,  es válido recalcar que estos festivales, han ayudado a internacionalizar la música chilena que viene de la mano del charango, en tanto estos eventos se replican año tras año en diferentes países, abriendo nuevos corredores culturales para Chile y el resto de los países que han sido sede».

La importancia del charango reside en que él resume la identidad latinoamericana y si bien es un instrumento mestizo, evoca una historia musical que nos hermana.

Expresa Ana Saladino: «Charangos del Mundo presenta sus conciertos como un auténtico Tributo a la Memoria. La metamorfosis sufrida por el charango se entrama profundamente con la historia de los movimientos sociales de nuestro continente dado que nos unen las mismas luchas. Al igual que en toda América Latina, la memoria colectiva retrotrae al charango junto al destino que le había sigo asignado a las manifestaciones populares, invisibilizadas y desaparecidas mediante el siniestro “Plan de Silenciamiento” al que fue sometido el canto popular, el artista popular y por qué no, el pueblo entero».

Una mirada sociocultural esgrime al charango como icono de los movimientos populares. Recuerda Ana que «El charango -como la quena y la zampoña- fueron símbolos de resistencia cultural en las universidades y espacios clandestinos, y hoy son el eco más genuino del canto del pueblo, de la voz del campesinado, de la cosmovisión andina, de la valentía renovada y redoblada de nuestros hermanos del altiplano, y en síntesis, de expresiones fuertemente vapuleadas en la dictadura. Sin dudas este presente aún padece los estigmas del pasado, por eso, para sanar y dar paso a un nuevo canto, nos dimos el trabajo de instaurar el encuentro “Charangos del Mundo”.

 

 

 

 

 

 

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